Canto de Cachudito (accesible vía QR).
Sonido: Guillermo Egli
Fotofgrafía: Vicente Valdés
Ilustración : Pila Raymond
Yo que aprendí a volar, con cada vuelo de profesores puros
en el bosque, en el mar, en las quebradas,
de espaldas en la arena
o en los sueños.
me quedé aquí, amarrado a las raíces,
a la madre magnética, a la tierra,
mintiéndome a mí mismo
y volando
solo dentro de mí,
solo y a oscuras.
(Vuelo; Arte de pájaros; Pablo Neruda)
“No se hacen tortillas sin quebrar huevos”, o todo los actos tiene consecuencias.
El cachudito recibe su nombre debido a la larga y negra cresta de pelo curvada hacia adeante, que tiene en su cabeza. En la cultura yagán solían referirse al cachudito y al picaflor de la misma forma dado que ambos son algunos de los pájaros más pequeños de Sudamé-rica, pesando menos de 10 gramos
Es un ave ansiosa que se mueve constantemente entre las ramas y las hojas de los árboles buscando su alimento, que usualmente son insectos, larvas y ocasionalmente, frutas y semillas.
El cachudito construye su nido en sitios bajos, entre las pequeñas ramas de los arbustos, formando una pequeñísima cesta de pastos y fibras, en donde pone dos o tres huevos. Su canto es como un suave chirrido en decrescendo. A su vez, suele emitir una canción territorial en las mañanas que consiste en una secuencia de breves y agudas notas (Rozzi, 2003). Mide unos 11 o 12 centímetros y habita entre la III y la IX región. Se lo ve en parejas o grupos familiares entre los 0 y 2.000 metros de altitud. Canta repitiendo chuip chiup (Jaramillo, 2011). Es muy activo, su vuelo es corto y ondulante, a veces se le ve en el suelo. Se alimenta y vive entre el follaje denso. Es curioso y bastante confiado (Couve, Vidal & Ruiz, 2016).